La caída de pelo en las mujeres es un problema de salud cada vez más frecuente en las consultas médicas y que en nuestra clínica representa el 40% de todos los casos. Aunque es una condición que afecta a ambos sexos, históricamente la alopecia masculina es más aceptada socialmente. La alopecia femenina afecta la autoestima y relaciones interpersonales, llevándolas a sufrir distintos casos de depresión y aislamiento, porque su pelo hace parte no solo de un estereotipo de belleza, de salud, si no que también juega un papel muy importante como elemento de comunicación y arma de seducción.