Tratamientos no quirúrgicos
Existen varios tratamientos científicamente comprobados para la calvicie: el minoxidil, el finasteride, el láser de baja intensidad y el plasma rico en plaquetas entre otros. Estos tratamientos sólo funcionan donde hay pelo.
Plasma rico en plaquetas o bioestimulación capilar con factores de crecimiento
Este tratamiento se realiza obteniendo sangre del paciente para extraer los factores de crecimiento que poseen las plaquetas. Estos factores de crecimiento se inyectan en el cuero cabelludo y se fijan al folículo piloso donde actúan hasta por 6 meses.
Las plaquetas son células sanguíneas que ayudan en el proceso de coagulación y que además son fuente de múltiples factores de crecimiento.
Cuando las plaquetas se activan, liberan todos sus factores de crecimiento. Es un tratamiento eficaz y seguro, ya que se trata de su propia sangre.
Se puede utilizar como complemento a los tratamientos tópicos y sistémicos o como complemento a su cirugía de trasplante capilar porque:
- Acelera el proceso de cicatrización
- Disminuye el riesgo de infección
- Aumenta el porcentaje de supervivencia de los injertos
- Acorta el periodo de reposo del folículo acelerando la repoblación de la zona sembrada
- Hace menos visible la cicatriz de la zona donadora
- Produce regeneración capilar del 20% de los folículos pilosos extraídos de la zona donadora en los pacientes tratados con el método FUE.
- Prolonga la fase anágena o de crecimiento del folículo piloso.
- Duplica la velocidad de crecimiento del cabello.
- Aumenta el calibre de la fibra capilar.
- Mejora el color del pelo.
- Mejora la cobertura hasta en un 75% las zonas tratadas.
- Aumenta la densidad capilar en las zonas tratadas.
- Es el único tratamiento que controla la caída activa del pelo en menos de tres semanas.
- Los cambios comienzan a notarse entre la 6 – 12 semana. El pelo se verá más brillante y grueso y estos beneficios irán aumentando a medida que se siga utilizando.
Tratamientos tópicos
Existen varias fórmulas magistrales a base de minoxidil, que actúan retardando la caída del pelo y mejorando la circulación local.
Su uso continuo da buenos resultados, pero cuando se asocia a alguna terapia sistémica son mucho mejores. Los champús están indicados cuando hay otros factores que contribuyen a la caída como la dermatitis seborreica.
Tratamientos orales
El Finasteride es un medicamento muy efectivo para detener la caída del pelo. Actúa bloqueando la enzima 5alfa- reductasa, responsable en la conversión de testosterona a DHT en el folículo piloso. Las mujeres en edad fértil no deben consumirlo. Los resultados comienzan a notarse a partir del 4to mes alcanzando su mayor efecto a los 2 años. Es un medicamento que debe ser tomado bajo supervisión médica.
Existen medicamentos complementarios a estos tratamientos, principalmente útiles para las mujeres. Son los antiandrógenos. Estos medicamentos modulan la producción de testosterona producida por las mujeres. Deben ser administrados bajo supervisión médica.
Otros tratamientos consisten en la utilización de integradores dietéticos ricos en oligoelementos que ayudan en la formación del pelo.
Láser
El láser funciona produciendo una luz con una longitud de onda específica que llega directamente al folículo piloso.
Esta luz es captada por las células encargadas de producir el pelo y la transforman en energía para su beneficio.
Esto se traduce en que el pelo mejora su grosor y calidad. Son necesarias 3 sesiones semanales de 15 minutos de duración. Los cambios comienzan a notarse entre la 6 – 12 semana.
El pelo se verá más brillante y grueso y estos beneficios irán aumentando a medida que se siga utilizado. Es un tratamiento comprobado científicamente, eficaz para el tratamiento de la caída del cabello.
¡Pelo para todos!
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¿Por qué usar tratamientos no quirúrgicos?
El éxito de cualquiera de los tratamientos de 2RMD radica en hacer un acompañamiento médico.
Muchos pacientes desisten de continuar su tratamiento por no ver resultados inmediatos. Pero es importante tener presente que, como el crecimiento del pelo es tan lento, los resultados comenzaran a notarse a partir del 4° mes. Si estos no son efectivos la única alternativa será la cirugía de trasplante capilar.
También es importante entender que, si la calvicie lleva muchos años, puede haber una buena respuesta inicial a los tratamientos no quirúrgicos, pero NO suele ser sostenible con el tiempo.
El tratamiento médico va encaminado a preservar el pelo original, no trasplantado o nativo de la zona genéticamente predispuesta a perderse.
En los casos de trasplante es un complemento tan importante como el mismo procedimiento.